La Loymark Future Ready Summit 2025, celebrada el 9 de octubre, destacó como uno de los encuentros regionales más relevantes sobre innovación tecnológica, inteligencia artificial y transformación empresarial. Bajo el lema "Desmitificar la innovación acercándola a la dimensión humana", el evento reunió a líderes empresariales, expertos en tecnología y pensadores estratégicos para explorar cómo la IA está remodelando la creación de valor en las empresas, las personas y la sociedad.

Una era de innovación exponencial

Inspirada en la reflexión de Peter Diamandis (fundador de Singularity University) de que "hemos visto más innovación en los últimos 50 años que en los cinco siglos anteriores", la Cumbre examinó el ritmo sin precedentes de la aceleración tecnológica. Desde el nacimiento del microprocesador en la década de 1970 hasta el auge de la inteligencia artificial en la década de 2020, los participantes reflexionaron sobre el poder de la convergencia tecnológica: la fusión de la computación en la nube, los datos, la robótica, el IoT y la IA que amplía exponencialmente los límites de la innovación.

Johan Loría y Marco Tristán, CTO y COO de Loymark, respectivamente.

Las paradojas de la inteligencia artificial

El núcleo de la Cumbre fue la exploración de las paradojas que definen cómo los individuos, las organizaciones y las sociedades se están adaptando a una realidad en la que las tecnologías exponenciales evolucionan más rápido que nuestra capacidad para comprenderlas. Loymark presentó tres paradojas fundamentales que todo líder debe comprender para navegar por esta transformación con claridad y determinación.

#1. La paradoja empresarial: aceleración y pausa

La inteligencia artificial simboliza velocidad, eficiencia y escala. Está transformando las industrias a un ritmo extraordinario, automatizando decisiones, optimizando procesos y redefiniendo cómo se crea valor. Sectores enteros se están reinventando, mientras surgen nuevos competidores con modelos basados en datos que desafían a los actores tradicionales.

Sin embargo, esta misma aceleración ha introducido un nuevo tipo de incertidumbre. Muchas organizaciones se están tomando un momento para hacer una pausa, replantearse sus estrategias de inversión y volver a trazar sus hojas de ruta para el crecimiento. La pregunta "¿Cómo podemos planificar un futuro que se reescribe a sí mismo cada trimestre?" se ha convertido en central para el liderazgo moderno. Esta paradoja pone de relieve la tensión entre la urgencia de innovar y la responsabilidad de mantener los pies en la tierra. Recuerda a los líderes que la transformación sostenible requiere no sólo agilidad, sino también reflexión, gobernanza y previsión ética.

#2. La paradoja humana: oportunidad y ansiedad

La inteligencia artificial también abre la puerta a oportunidades extraordinarias. Están surgiendo nuevas funciones, competencias y profesiones a un ritmo nunca visto. Desde prontos ingenieros a éticos de la IA y narradores de datos, los profesionales están aprendiendo a utilizar la tecnología como amplificador de la creatividad y la inteligencia.

Sin embargo, esta misma revolución provoca ansiedad. La gente se cuestiona su relevancia, sus trayectorias profesionales y su propósito en un mundo en el que las máquinas ya pueden aprender e incluso crear. Para muchos, la pregunta ya no es "¿Qué debo aprender ahora?", sino "¿Seguirá siendo importante lo que sé?". Esta paradoja exige una redefinición del liderazgo y la educación, que genere confianza en lugar de miedo, curiosidad en lugar de resistencia y sentido en lugar de mera eficiencia. En opinión de Loymark, el futuro del trabajo dependerá tanto de la empatía, la adaptabilidad y la comprensión cultural como de la habilidad técnica.

#3. La paradoja del consumidor: poder y sobrecarga

Hoy en día, los consumidores tienen más poder que nunca. La IA les ofrece experiencias personalizadas, acceso instantáneo a la información y la capacidad de exigir precisión, relevancia y conexión emocional en cada interacción. Sin embargo, el poder tiene un precio. La abundancia de contenidos, opciones y estímulos ha creado una era de sobrecarga. En un mundo en el que los algoritmos pueden anticipar nuestras preferencias mejor que nosotros mismos, las personas no buscan necesariamente más opciones, sino más significado. Ansían simplicidad, autenticidad y confianza.

Para las marcas y las empresas, esta paradoja es un poderoso recordatorio de que el éxito en la era de la IA no vendrá de añadir complejidad, sino de crear experiencias centradas en el ser humano que corten el ruido y restauren la claridad y la conexión emocional.

Alberto Garnier, Chief Growth Officer de Loymark.

Un nuevo prisma para el liderazgo

Enmarcando la inteligencia artificial a través de estas paradojas, Loymark invitó a los participantes a mirar más allá del bombo publicitario y ver la IA como lo que realmente representa: un espejo de nuestras decisiones colectivas. Cada algoritmo refleja una mentalidad. Cada innovación encarna un sistema de valores. Comprender estas tensiones: aceleración y pausa, oportunidad y ansiedad, empoderamiento y sobrecarga, es el primer paso para construir un futuro en el que la tecnología y la humanidad evolucionen juntas y no separadas.

De las mejores prácticas a las próximas prácticas

Loymark hizo hincapié en que la disrupción no consiste únicamente en adoptar nuevas tecnologías, sino en redefinir el modo en que las organizaciones integran la IA como fuerza impulsora de la creatividad, la eficiencia y el valor. La Cumbre animó a los líderes a ir más allá de los marcos establecidos y adoptar las "próximas prácticas", enfoques que reconocen el cambio constante como una oportunidad para experimentar, aprender y adaptarse continuamente.

América Latina y la paradoja de la IA

Medios de comunicación como Revista Summa, ACIS Colombia y La Nación Costa Rica se hicieron eco de una conclusión crítica de la Cumbre: mientras que el 78% de las empresas latinoamericanas afirman utilizar la IA, menos del 1% la aplican de forma eficaz.

El acto subrayó la urgente necesidad de cerrar esta brecha mediante la educación, el liderazgo visionario y la colaboración, garantizando que la IA se convierta en un motor práctico para el crecimiento y la inclusión en toda la región.

"El reto no es adoptar la inteligencia artificial; es transformar la mentalidad de las organizaciones para convertirla en resultados reales". - Mensaje clave de los debates de la Cumbre.

Equipo de producción de la Cumbre Loymark Future Ready 2025.

Conclusión

La Loymark Future Ready Summit 2025 no fue un evento sobre tecnología, sino sobre la humanidad en una era de disrupción. El verdadero objetivo es entender la innovación como un fenómeno social antes que técnico y aceptar el reto de construir un futuro en el que la tecnología amplifique, en lugar de sustituir, el potencial humano.

A través de esta edición, Loymark reafirmó su papel como una de las organizaciones más vanguardistas de América Latina, comprometida con la integración responsable y estratégica de la inteligencia artificial en los negocios, la comunicación y la creación de valor.